top of page
Buscar

Mi libertad, la de los demás y la del Chapo

  • Foto del escritor: Laura Iñigo
    Laura Iñigo
  • 11 jul 2015
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 4 abr 2020


Como muchos saben, la moto da para pensar, filosofar, reflexionar y crear, a veces solo se piensa en el bicho que se te metió en la nariz por no traer el casco completo, otras en el motero jijo que te rebasó y apenas te diste cuenta por la velocidad en la que lo hizo. Pero también hay momentos en que, por lo menos a mi, me da por hacerme preguntas o llorar penas y hasta buscar soluciones a problemas.

Ayer, mientras recorríamos la Toscana a 50km por hora, con su calor, sus curvas, sus viñedos y sus pueblos medievales, me preguntaba si éstos momentos representaban la libertad en su máximo contexto. En mi caso sí los representan, el poder tomarme un tiempo y andar en moto por lugares como estos son un símbolo concreto de lo que la libertad representa para mi.

Hay mil formas de sentirse libre, no lo dudo, habrá algunos que consideren el dinero como un factor importante para sentirse libres, hay otros que lo consideran una atadura. Habrá otros que piensen que el único camino hacia la libertad es el conocimiento y la cultura o los viajes y la lectura. Hay personas que solo pueden concebir la libertad a traves del trabajo social e incluso algunas piensan que su libertad consiste en poder ver la novela de las 9 por el canal de las estrellas sin interrupciones y acompañados de su coca cola de a litro.

Para los presos, la libertad es un concepto sencillo, salir de la cárcel en la que se encuentran. Imagino las ganas del Chapo de escaparse, otra vez. Me pregunto cómo es que lo planeó, desde cuándo empezó a urdir su plan, si ya sabía qué hacer en el momento que lo atraparon. Quiero pensar que tuvo mucho tiempo para pensar mientras estaba sentado en su celda, que de alguna forma solo esperaba a que los suyos terminaran de negociar su salida, el túnel es algo inaudito, no puedo creer que supieran el lugar exacto para llegar a las duchas del penal, que los guardias no tuvieran tiempo de atraparlo al momento en que se dieron cuenta, que nadie se haya percatado de ruidos y movimientos cuando se construía un túnel. Es mucho más factible que el Chapo y su gente haya negociado su fuga con todos los interesados, desde los guardias del penal hasta el gobierno federal.

Al final todos tenemos un concepto de la libertad diferente. ¿Cuál es el suyo?

コメント


bottom of page