Viena y su tranquilidad en domingo
- Laura Iñigo

- 19 jul 2015
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 4 abr 2020
Hoy es domingo y Viena duerme, entre el calor y el día de guardar no te encuentras a nadie en la calle, el sabor de barrio que obtienes al quedarte en un departamento en lugar de en un hotel no se siente. Las calles solitarias se caminan en silencio, solo se escucha el tranvía y uno que otro pajarito.
Viena es pequeño y ya lo conozco así que decidí quedarme en casa toda la mañana para ponerme al día con los blogs, es una ardua tarea esto de manejar kilómetros, filmar, mantenerte alerta, llegar a casa o al hotel, bañarte, correr al súper para que no lo cierren, cenar y luego ponerte a escribir o a editar. Mi cuerpo, a pesar de su dimensión, no da para tanto. Necesito dormir y lo hago muy temprano para mis estándares, a las 11:30 ya estoy roncando. En las mañanas tengo algún momento antes de prepararnos a salir así que trato de escribir algo pero no siempre tengo el tiempo.
Salí a darme un paseo a media tarde y caminé más de 5 kilómetros. Pasé de una zona comercial de barrio con heladerías, restaurantes y hasta una librería abierta a la zona turística del centro. Me impresionó la cantidad de ruido después del silencio impuesto cuadras atrás. Me regresé a casa presurosa a poner la segunda lavadora. ¡Que entusiasmo!

Window Shopping que le dicen...

Me encontré a George Clooney en un aparador y me parece que Olivia quería irse con él. Bad George sin casco, bad! Ya se me había olvidado la lana que estos actores hacen fuera de Estados Unidos por anuncios como estos.





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