La nueva que es vieja
- Laura Iñigo
- 27 jun 2018
- 1 Min. de lectura
Actualizado: 4 abr 2020
Hace unos días pasé por mi nueva moto que no es tan nueva porque tiene 10 años pero eso no me asusta, mis motos siempre han sido usadas y no me han dado muchos problemas ni me han creado complejos. Me he acostumbrado a comprarlas usadas y dudo que alguna vez me compre una nueva. Las motos y los autos se devalúan en el momento que salen de la agencia y me parece que las motos son más rápidas en perder su valor.
El riesgo de comprar una moto usada, además de las fallas técnicas que puedan esconder, es que no tienes un margen de elección. Puedes elegir el tipo de moto pero no el color o el modelo. En mi caso hubiera preferido una F650GS, una moto a la que estoy muy acostumbrada, me gusta su ligereza tamaño y efectividad.
Al final lo que encontré fue esta F800GS que me gusta, había incluso soñado con tener una algún día pero sabía que era demasiado alta. Y sí, la siento alta y eso me pone nerviosa cuando estoy parada o aparcándola.
Mi primer viaje fue a Camallera, bastante ligero y cómodo. Evité las autopistas y rodé por rutas alternas, el viaje se duplica en tiempo pero también en curvas y paisajes, todo es más placentero aunque tome más tiempo.

Comments