Balance de 60 días en la semana 9
- Laura Iñigo
- 1 jun 2020
- 3 Min. de lectura
Llegamos a los 60 días y al intentar hacer el balance perdí todo lo que había escrito.
Se me perdió en el limbo del blog y no se donde encontrar todo lo que había ganado y perdido en estos últimos 30 días.
Así que lo primero que me viene a la cabeza como perdido es el texto original de esta publicación. Empiezo de cero.
Lo ganado
- La costumbre de socializar por zoom. Con más de 12 reuniones por este medio, ya puedo decir que me parece normal vernos a través de una pantalla. No me gusta pero es lo que hay.
- El descubrir que el whatsapp sirve para mucho más que un grupo de amigos que se escriben, también le dió vida a Radio Putxet que ya merece un texto aparte.
- Kilos seguro, y es que no he salido a correr tanto como antes, más bien creo que salí una sola vez en estos 30 días, la paranoia y la ansiedad no ayudan.
- Ansiedad, esa que te da al conocer la nueva normalidad que no me gusta nada.
- Conferencias de arte, cine, documentales, y alguno que otro concierto, charlas con escritores, conocimientos culinarios gracias a YouTube que nunca llegarán a ser como mis cursos en Fabulous Kitchen que tanto extraño.
- Vecinas con las que se ha afianzado una amistad. Ya pasamos del "qué gusto conocerte" al "que pena que nos vamos pronto"
- La gestión de la implementación de un nuevo sistema de seguridad en el edificio que es superior al que teníamos y mucho más barato.
- Unas vecinas que ya no nos saludan porque se siente atacadas al pedirles cuentas de su mala gestión. Lo que he ganado es no tener que escucharlas, por ahora.
- El gusto de ver la conferencia de las 7, con angustia.
- Un dolor en la rodilla que apareción en la primera salida a correr después de no haberlo hecho en tres semanas.
- Mucho tiempo al dejar de discutir con todos los que odian a este presidente que tenemos y no creen para nada en lo que dice el subsecretario de salud. Ahora insisten en buscar físicamente el aplanamiento de la curva, y cuando buscan esto es que no han entendido nada, en fin, ahí los dejo con su indignación absurda.
- Dos pequeños brotes que plantó Pilar, un apio y una lechuga, es emocionante verlos salir y crecer.

- Unos limones que me trajo una vecina de su rancho. Un gesto para agradecer mi labor en la seguridad del edificio. Se agradece que valoren y me encantan los limones mexicanos.

- Un año más, en este mes cumplo 54 añotes. Uff pesan un poco y no por los kilos que he ganado.
Lo perdido
- El texto original de esta publicación, ahora son las 12 de la noche y estoy reescribiendo todo, y con la poca memoria temporal que tengo, éste ya será otro texto muy diferente.
- Mucho tiempo en vaciar un par de computadoras para venderlas, con lo que me gusta a mi guardar cosas, incluso en las PC's.
- Más tiempo perdido, dos meses de este 2020 en donde lo que más echo de menos es la vida social, quiero abrazar a mis amigos y a mi familia y brindar y bailar.
- Una clase de baile que me regalaron aunque espero poderla recuperar. Quiero bailar como cubana pero me temo que mi lado vasco me lo impedirá, ya saben, duros como un tronco...
- Dos semanas que tenía que aprovechar para adelantar mi libro y no hice nada por andar ocupada con la seguridad del edificio.
- Toda una temporada de la Liga de fútbol, echo de menos verlo y comentarlo con mi amigo, el que quisiera ser director técnico del Barça (no me mates).
- La esperanza en que este país mejore en conciencia, en responsabilidad, en gratitud y en civilidad. Me jode mucho ver que la gente no se guarda cuando puede hacerlo, que en lugar de salir a aplaudir a los trabajadores de la salud como lo hacen en otros países, aquí los atacan. Que no entiendan que esto va para largo y que todo lo quieran politizar, no hay un frente común y creen que todo es culpa del gobierno, no importa que la OMS felicite al gobierno mexicano por no saturar hospitales, la gente sigue pensando que nos engañan con las cifras, y yo insisto en que me digan quién tiene los números exactos. Ojo, no canto victoria, ya veremos cómo nos va porque esto no termina.
- Un día pensando que más he perdido pero ya creo que es suficiente, así que aquí lo dejo, por más que quiero nivelar entre lo ganado y lo perdido, lo bueno sigue tomando la delantera.
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